La seducción por el mirada
Actualizado por última vez en: 17 junio, 2016
Mantener la mirada transmite emociones y envía multitud de mensajes. Y es que el contacto visual es un delicado arte que hay que saber manejar. Conocer las intenciones de desconocidos a través de sus miradas y si, después de ellas, es apropiado mantener una charla es algo difícil de saber. De hecho, en multitud de ocasiones, el cruce de miradas sucede sin ningún propósito en particular. Por ello, queremos ofrecer nuestros mejores consejos de seducción para que los solteros como tú optimicen sus técnicas para ligar. ¡Dominar el lenguaje corporal es un importante activo de cara a conseguir conquistas!
¿Qué es el contacto visual?
Ella te mira y tú lo ignoras. Después, le lanzas una mirada y ella te da la espalda. Más adelante, sus ojos se encuentran con los tuyos y te sonríe pero, a continuación, vuelve a girar la cabeza. Tú vuelves a insistir con la esperanza de que volverá a entablar contacto visual contigo. Sin lugar a dudas, ¡este juego de seducción es muy habitual y puede prolongarse durante varias horas!
La mirada permite demostrar interés por alguien. Por ello, si alguien te mira, te está enviando una señal inequívoca. Sin embargo, para que la conexión pueda suceder, es necesario que la otra persona reciba y envíe la misma señal. Si esto no ocurre es que la otra persona no está interesada en interactuar.
La importancia del lenguaje no verbal en el juego de la seducción
La mirada sirve, entre otras cosas, para seducir pero, igualmente, también es muy útil para obtener respuestas. Por ejemplo, cuando la persona no la mantiene es que, probablemente, no esté interesada en conocerte realmente.
Una mirada también permite realizar un análisis acerca de la honestidad de la persona que la echa. En este sentido, cuando alguien te mira a los ojos mientras te habla, o ha sido objeto de una formación intensiva como en el caso de los vendedores o es más que probable que su discurso sea sincero, confiable y honesto. Por el contrario, aquellos que no lo hacen y te rehuyen la mirada no inspiran confianza.
Además, ¡la mirada es un signo de seguridad y un arma! Por ejemplo, durante un enfrentamiento o una discusión, el primero que baja la mirada es considerado como el más débil.
Una herramienta perfecta para conectar con otros solteros
Para utilizar los ojos como herramienta de conexión con otras personas es imprescindible transmitir seguridad y estabilidad. De hecho, si no eres capaz de mantener la mirada fija en el otro, no servirá de nada. El propósito de esto es molestar a otra persona sin parecer un monstruo. Por eso, moderar la intensidad con la que clavas una mirada en otra persona es esencial. En este sentido, si es demasiado agresiva puede llegar a incomodar a aquel al que va dirigida y es probable que, incluso, ¡acabes metido en problemas!
El contacto visual no hace todo el trabajo de seducción pero, sin duda, permite iniciar la comunicación con la otra persona con el objetivo de interactuar más en el futuro. Es, en definitiva, un juego real que invita a avanzar en el proceso de ligar de cara a tener una primera cita o, por qué no, un primer contacto físico.